20 de mayo de 2010

EL PEZ MASTURBADOR DE ONFRAY

"Tras abandonar a Demócrito, preguntémonos en qué latitudes desova este pez masturbador que va a ser útil para mis consideraciones sobre el deseo. ¿En qué aguas frías o templadas, en qué mares extraños, o en qué ríos de agua dulce? ¿Alisado y acariciado por qué corrientes marinas? ¿Ondulado y flotante en qué ribera secreta? Pues el animal debe aprovechar voluptuosamente el secreto de los mundos líquidos donde evoluciona en silencio. ¿Se cruza a veces, de soslayo, con la platija platónica de boca angulada y ojo al revés, que pasa mirando por encima del hombro a ese chistoso que manifiesta la excelencia del principio de autonomía llevado a su paroxismo? ¿Le hierven el vientre y las aletas caudales cuando se encuentra cerca de la ostra metafísica? ¿O, indolente, ignora que proporciona al filósofo una metáfora más a su zoo libidinal?"
ONFRAY, MICHEL. Teoría del cuerpo enamorado. Por una erótica solar. Ed. Pre-textos. Valencia, 2002. Pag.77. Trad: Ximo Brotons.

No hay comentarios: